La instalación de un nuevo órgano de la Catedral culminaría a fin de mes y el concierto inaugural sería en febrero. La adquisición por 88.000 euros permitirá cultivar la música sacra y fomentar generación de organistas.
Se dio a conocer que Paraguay se posicionará como un nuevo destino para oír música sacra y de otros estilos, gracias a la instalación de un nuevo e imponente órgano de 1.563 tubos en la Catedral de Asunción.
De esta manera lo anunció el músico Stefano Pavetti, coordinador del proyecto, quien adelantó que la instalación culminaría a fines de enero de mano de los constructores de la empresa italiana de Lorenzo Pedrazzi, quienes están en el país, y que el instrumento se inauguraría con un concierto a confirmar en febrero próximo.
Todo sobre la nueva adquisición
Esta reciente adquisición, valorada en 88.000 euros (unos G. 585.200.000) y que aún se sigue pagando gracias a las donaciones de empresarios y de la feligresía católica, permitirá cultivar no solo la música sacra y de otros estilos, sino reactivar el circuito organístico capitalino –con el instrumento de la Encarnación y la eventual restauración del órgano del ex Seminario Metropolitano– y fomentar una nueva generación de organistas, casi inexistente en el país, según revela Pavetti.
«Este instrumento contribuirá enormemente al culto, a la celebración eucarística y también a la educación musical en el Paraguay, pues permitirá que instituciones como el Ateneo Paraguayo abran su cátedra de órgano. Esperemos que el Conservatorio Nacional de Música en un futuro cercano haga lo mismo», sostuvo.
Luego de arribar a un acuerdo con el Ateneo Paraguayo, brindará un curso de órgano, para el cual preparará un programa exclusivo con materiales de Italia y que lo adaptará a la realidad del país, ya que el músico cuenta con especialización en teclado antiguo en la Civica Scuola y el Conservatorio de Música Giuseppe Verdi, ambos de Milán.
En este sentido, se aseguró que el contar por primera vez en el país con un órgano a tubos de grandes dimensiones significó «mucho esfuerzo y sacrificio» y hoy es una realidad a instancias de monseñor Edmundo Valenzuela, arzobispo de Asunción.
Esta noticia también enfatizó el hecho de que se permitirá la reactivación del circuito organístico de Asunción y a futuro generar alguna especialización en música sacra, actualmente inexistente en el país. «Pese a que usualmente se dice que el piano es el instrumento rey, en realidad lo es el órgano, debido a que se emplean las manos y los pies, lo cual genera una diversidad de sonidos, con esa grandeza y majestuosidad única», señaló.